Detalle del tratamiento:
Medicina Estética: Se requiere diagnóstico médico
Grado de dolor: Prácticamente indoloro
Duración del tratamiento: 2 sesiones en 2 meses consecutivos con revisión a los 6/8 meses
Duración de la sesión: 20-30 minutos
Sensación: Ligeras/leves infiltraciones
Efectos: Aporta hidratación y elasticidad a la piel a la vez que tensa los tejidos favoreciendo su tonificación sin efecto volumen
Resultados: Una piel revitalizada y luminosa. Efecto anti-aging inmediato
¿En qué consiste?
Profhilo se realiza mediante la técnica BAP que se basa en un marcaje de 5 puntos de inyección en cada lado del rostro, dónde se irá aplicando dos mililitros de producto en cada lado.
Estos 5 puntos son las 5 áreas anatómicamente receptivas del rostro donde se produce esa ausencia de grandes vasos y ramificación nerviosa. De esta manera se reduce al mínimo los posibles riesgos y se maximiza la difusión del producto en las áreas malar y submalar. Además al no ser necesario un gran número de pinchazos la probabilidad de aparición de hematomas disminuye.
Su aplicación se realiza en dos únicas sesiones con unas 4 semanas de intervalo. Al ser un tratamiento ambulatorio se aplicará únicamente una anestesia local o frío local para evitar alguna posible molestia durante el proceso, el cual tiene una duración máxima de unos 15-20 minutos dependiendo de la zona.
¿Qué casos resuelve?
Esta técnica se usa para combatir y prevenir el envejecimiento facial mediante la bioremodelación, lo que retarda y revierte los efectos de la laxitud cutánea.
Gracias a esta gran combinación de técnica y producto se logra un estímulo de producción de colágeno que ayudarán a devolver la densidad, elasticidad y firmeza a todas las estructuras dérmicas.
Consejos para después del tratamiento:
– Usar protección solar.
– Mantener la piel hidratada.
– No realizar otras infiltraciones.
– Consultar compatibilidad con algunos medicamentos.
No recomendado para:
– Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
– Personas con infecciones cutáneas activas que presenten signos de rellenos previos permanentes.
– Personas enfermas de cáncer, con enfermedades autoinmunes o que tomen anticoagulantes.