Detalle del tratamiento:
Medicina Estética: Se requiere diagnóstico médico
Grado de dolor: Prácticamente indoloro
Tiempo de recuperación: No se necesita tiempo de recuperación
Duración del tratamiento: Depende de cada caso
Duración de la sesión: 20-30 minutos
Sensación: Ligeros pinchazos, muy suaves
Efectos:
¿En qué consiste?
El tratamiento se basa en la inserción de hilos en la dermis para que tensen la piel y generen tejido fibroso, induciendo el autolifting biológico. Los hilos facilitan que el colágeno avance hacia determinadas zonas que se pretendan tratar.
Además de ello, esta técnica de hilos tensores es combinable con otros tratamientos de rejuvenecimiento facial para prolongar y mejorar los resultados.
¿Cuándo veré los resultados?
Durante la primera semana notaremos los primeros resultados, cuando empiece a bajar la hinchazón de los tejidos. Tras las primeras semanas notaremos resultados más notorios, y llegando al tercer mes del tratamiento alcanzaremos el resultado óptimo.
Aún así, debemos considerar que dependiendo de las características del paciente y de la zona concreta a tratar, los resultados pueden variar para poder notar en los hilos tensores antes y después.
¿Cuánto dura el tratamiento?
La duración dependerá de diversos factores (tipo de piel, edad del paciente, etc.). El tratamiento, puede prolongarse desde un año hasta un año y medio, y las sesiones suelen durar, cada una, media hora aproximadamente.
Si te estás preguntando cuánto cuestan los hilos tensores debes saber que en nuestra clínica ofrecemos siempre a todos y cada uno de nuestros pacientes las mejores tarifas y precios en hilos tensores de todo Chile y con resultados más que asombrosos.
Consejos para después del tratamiento:
– Usar protección solar.
– Mantener la piel hidratada.
– No realizar otras infiltraciones.
– Consultar compatibilidad con algunos medicamentos.
No recomendado para:
– Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
– Personas con infecciones cutáneas activas que presenten signos de rellenos previos permanentes.
– Personas enfermas de cáncer, con enfermedades autoinmunes o que tomen anticoagulantes.